Randy Remington
Randy Remington

Las transiciones ofrecen desafíos que no experimentaríamos de otra forma. Los cambios que estas transiciones traen son inevitables. Estos vendrán, pero tenemos una opción en cómo responder.

Es tentador retirarse, prefiriendo un pasado más familiar. El presente y futuro pueden parecer tan inciertos. Solo puedo imaginarme cómo debe ser liderar a su rebaño a través de esta pandemia. Puedo imaginarme los correos electrónicos que pueda estar recibiendo de los muchos lados de cada asunto. Facciones competidoras pueden hacerlo sentir que está siendo jalado en direcciones opuestas. He estado ahí, y todavía estoy experimentando aquellas tensiones en mi nuevo rol.

Y, sin embargo, con el cambio también viene la oportunidad. Dios es fiel en usar las transiciones en nuestras vidas para hacernos crecer junto con Su reino, y le servimos con confianza, confiando en Su fidelidad incondicional. Eso suena cliché y casi vacilo en escribirlo. Todos hemos enseñado esta verdad tantas veces que a veces puede fallar en penetrar suficientemente en nuestros propios corazones. Sin embargo, si escuchamos y respondemos con disposición renovada, podemos abrir un sendero único y mostrar a nuestro prójimo un camino mejor.

Dios siempre se ha mostrado fiel aun en medio de los tiempos más perturbadores. Las palabras de Pablo a la iglesia en Roma nos recuerdan esto. Guiado por el Espíritu Santo, el pueblo de Dios recibió a los gentiles en lo que había sido un movimiento claramente judío. No fue nada menos que una transición inquietante para los seguidores de Jesús en ese tiempo. Esto causó algunas tensiones que Pablo abordó.

Acepten a los creyentes que son débiles en la fe y no discutan acerca de lo que ellos consideran bueno o malo. 

… propónganse vivir de tal manera que no causen tropiezo ni caída a otro creyente… que ningún alimento en sí mismo está mal; pero si alguien piensa que está mal comerlo, entonces, para esa persona, está mal. Si otro creyente se angustia por lo que tú comes, entonces no actúas con amor si lo comes. No permitas que lo que tú comes destruya a alguien por quien Cristo murió. … Pues el reino de Dios no se trata de lo que comemos o bebemos, sino de llevar una vida de bondad, paz y alegría en el Espíritu Santo.
—Romanos 14:1, 13-17 (NTV, énfasis añadido)

Aunque los asuntos de hoy son diferentes, debemos abrazar la Ley del Amor como ellos lo hicieron. Debemos ser un pueblo justo que destila la paz y el gozo del Espíritu, sin importar qué cambios aparezcan en nuestro camino. Es por eso que oro por usted. Quiero que los ojos y oídos de sus corazones vean y escuchen a nuestro fiel y amoroso Dios, que nos guía a través de todas las transiciones. Aun mejor, Él tiene cosas buenas preparadas para nuestro movimiento, porque solo Él es el dador de todo buen y perfecto don. Eso nunca cambiará.

Al seguir a Dios, que nuestra familia Cuadrangular esté marcada por la justicia, un shalom pacífico, y gozo rotundo en el Espíritu Santo. Veo estas cualidades en Glenn Burris Jr., nuestro presidente saliente. Él ha modelado estas virtudes durante su tiempo al frente, ofreciendo ánimo a otros mediante su ejemplo. La fe inquebrantable de Glenn lo ha sostenido como presidente, especialmente cuando las transiciones que fue llamado a navegar no fueron bienvenidas. Él ha terminado bien, y estoy tan agradecido por su mentoreo y amistad.

Espero que la edición de Otoño 2020 de la revista Foursquare Leader le anime. Recuerde que las transiciones son una parte inevitable de la vida. Vivir es cambiar, y los grandes líderes que crecen a través de las transiciones, traen bendiciones a todos aquellos a los que sirven.

es presidente de La Iglesia Cuadrangular (Estados Unidos).
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