Desde 1923 hasta el momento de su muerte en 1944, Aimee Semple McPherson lideró un alcance misional intencional que resultó en la plantación, o adopción y desarrollo, de 63 congregaciones de habla hispana. Una congregación, la Misión Mexicana McPherson, creció hasta tener más de 1.000 miembros, y varias otras tenían unos 500 miembros. Estas congregaciones entrenaron a cientos de pastores y líderes, y algunas establecieron fuertes Institutos Bíblicos en California y otros estados.

 Un recorte del periódico sobre la Misión Mexicana McPherson 

El crecimiento del ministerio de habla hispana fue tan pronunciado en California y en otros lugares en los Estados Unidos, que se tuvieron que crear divisiones dentro de distritos existentes. En 1929, este crecimiento proveyó la oportunidad para nombrar al Rev. A.M. López como el “Pastor a Cargo de la Obra Mexicana en el Distrito del Sur” en Texas.

El hermano López lideró una conferencia significativa en español para celebrar todo lo que Dios estaba haciendo y para proyectar una visión para el futuro. Se hizo un llamado a orar para que Dios levantara más “Obreros Americanos” del L.I.F.E. Bible College, quienes aprendieran a hablar español y fueran a este “campo misionero” con la esperanza de tener “por lo menos 100 iglesias mexicanas más dentro del próximo año o dos”. ¡Estos fueron días emocionantes y llenos de fe!

La pasión de la Hermana McPherson por alcanzar y asociarse con la comunidad hispanohablante se experimentó de muchas maneras prácticas—y para su época, radicales. Ella lideraba una mega-iglesia según cualquier estándar, mientras movilizaba a su congregación de habla inglesa a orar, dar e ir al campo misionero en Los Ángeles, creando de manera efectiva un componente transcultural en su estrategia de alcance local.

Los obreros que construyeron las instalaciones para las congregaciones hispanohablantes frecuentemente vinieron de Angelus Temple. La Hermana Aimee hizo este llamado a las misiones domésticas en la revista Foursquare Crusader [Cruzado Cuadrangular] en abril de 1930.

“Debemos, debemos tener un tabernáculo español”, escribió. “¡La gente está hambrienta de la Palabra de Dios y está buscando que nosotros le demos esa luz! Oh, ¿no me ayudarían a alcanzarlos? Los Ángeles es la segunda ciudad mexicana más grande del mundo, la primera es Ciudad de México en México. Hemos estado haciendo la obra misionera en el extranjero y enviando misioneros, pero justo aquí, en nuestra propia cuidad, hay una oportunidad de hacer una obra tan maravillosa como en el extranjero”.

El ministerio de habla hispana fue cada vez más conocido en Angelus Temple, y el primer Departamento Hispano fue lanzado en 1928 bajo el liderazgo del hermano Patricio López. Cultos dominicales y clases eran llevados a cabo en español tanto en el santuario como en el auditorio. Igualmente, los materiales Cuadrangulares y los sermones de la Hermana fueron traducidos al español. La Familia fue maravillosamente celebrada en el otoño de 1929, cuando los congregantes hispanohablantes fueron invitados a convertirse en miembros de Angelus Temple.


NOTA DEL EDITOR: Este artículo fue adaptado de la disertación doctoral: “Aimee Semple McPherson y el Ministerio de Habla Hispana en Los Ángeles: Lecciones para la Iglesia Cuadrangular del Siglo Veintiuno”, de Jim Scott, D.Min.

Esta es la Parte 2 de 3 en una serie de artículos destacados.

La Parte 1 detalla el llamado de Aimee Semple McPherson a alcanzar a la ciudad de Los Ángeles y la comunidad hispana.

La Parte 3 cubre el entrenamiento de estudiantes del L.I.F.E. Bible College para el ministerio de habla hispana y la plantación de iglesias.

Lea la Parte 3